Philip-Lorca DiCorcia es un fotógrafo estadounidense, nacido en 1951 en Hartford, Connecticut. Empezó a desarollar su interés por la fotografía a principios de los 70s. Estudió en la Universidad de Hartford y continuó su formación en la Universidad de Yale, en la que obtuvo el Master of Fine Arts degree in Photography en 1979. Actualmente vive en Nueva York y enseña en la Universidad Yale en Connecticut.
“Siempre he utilizado iluminación artificial. Siempre he superpuesto un cierto sistema sobre el mundo que observo. Pero no creo que los flashes electrónicos supongan una modificación de la realidad mayor que el blanco y negro”.
En su obra se puede percibir una mezcla de realidad y ficción. Escenas que pensamos que son reales son escenografías y viceversa. El fotógrafo menciona que la realidad es un término muy subjetivo. Una fotografía nunca puede ser real. Di Corcia es mundialmente conocido por ser uno de los renovadores de la fotografía callejera al mezclar la luz artificial y natural de una manera muy selectiva. Usa cámaras de medio y gran formato y múltiples flashes estroboscópicos. Su técnica consiste en colocar flashes a una cierta altura en el mobiliario urbano y mediante control por radio, los dispara desde su cámara cuando el personaje que le interesa pasa por el lugar.
La producción artística se constituye por imágenes de escenas cotidianas y retratos. Su obra se puede catalogar como una especie de documental ficcional. En todas sus obras se aprecia una gran conexión tanto con la representación pictórica clásica como con la estética cinematográfica. La estudiada iluminación dramática y el equilibrio en la composición caracterizan la mayoría de sus fotografías. Hoy se le conoce como el maestro de la luz artificial.
DiCorcia ha recibido varios reconocimientos, como el Infinity Award for Applied Photography from the International Center of Photography en Nueva York y National Endowment for the Arts.
El fotógrafo empezó su carrera retratando amigos y familiares en interiores ficticios y desconocidos en espacios urbanos. La soledad parece presidir cada una de las escenas. Las imágenes de los personajes retratados en muchas de las fotografías de DiCorcia, que parecen ausentes y aislados, nos recuerdan la vida de la ciudad… la soledad de la gran ciudad, sus habitantes, su situación y su drama personal.
En 1989 empezó el proyecto Hustlers sobre la prostitución masculina en Hollywood. Hustlers es una serie de fotos de prostitutos en el bulevar de Santa Mónica, el lugar de comercio homosexual más frecuentado de Los Ángeles. Las fotografías fueron muy polémicas porque el artista reconoció que había pagado a los prostitutos con dinero de una beca pública que había recibido. Aunque las fotos se tomaron en la calle, cada una está cuidosamente preparada.
Con el paso de tiempo empezó a fotografiar a personas solitarias desconocidas en espacios urbanos: Berlin, Calcuta, Hollywood, Nueva York, Roma y Tokio. Las series Hustlers, Streetwork, Heads, A Storybook Life y Lucky Thirteen se consideran una exploración funcional y visceral del arte de la fotografía.
Philip Lorca diCorcia es sin duda uno de los artistas contemporáneos más importantes de este siglo.
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Por Irini Vou
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